¿Quieres disfrutar del maravilloso clima mediterráneo? Entonces, nada mejor que visitar un enclave especial de la Comunidad Valenciana. Y, entre los espacios más bonitos para pasar una buena temporada, Dénia se destaca como una joya de gran herencia cultural, paisajes sin par y una rica gastronomía que enamora a todo el que visita este destino.
En AR Luxury conoces el atractivo de Dénia y queremos compartir contigo los 12 lugares que ver en Denia para disfrutar al máximo tu estancia o, en caso de que quieras quedarte como un residente más, sepas qué hacer en Dénia para siempre pasarlo en grande.
¿Estás listo para conocer un municipio mágico, lleno de historia y con una población que sí sabe disfrutar de la vida? Entonces empecemos ya mismo este recorrido por este destino imperdible de España.
Este es un muy buen punto de partida para hacer la ruta urbana por Dénia. Torrecremada ofrece una ubicación estratégica y, por lo general, es fácil encontrar aparcamiento en sus inmediaciones. Este oasis verde es un pulmón sin igual en el centro urbano de Denia.
Fue creado en la década de 1980, tomando como eje central la imponente Casa de la Torre Cremada, una construcción que data del siglo XIX.
El Castillo de Dénia es, sin lugar a dudas, el guardián de la historia de la ciudad. Dentro de sus muros alberga vestigios de romanos, musulmanes y cristianos. Ante la interrogante de qué ver en Dénia y en específico en su castillo, está el recorrido por sus torres, salas y pasillos que te ayudarán a revivir las diferentes etapas que han moldeado su identidad.
Pero esto no es lo único que harás en este paseo. En la cima del castillo encuentra el Museo Arqueológico, que, con sus cuatro salas, ayuda a profundizar el recorrido. En este espacio encontramos una colección de objetos que van desde bronces musulmanes hasta cerámicas andalusíes.
Lo importante de estas piezas es que le cuentan a locales y visitantes cómo era la vida cotidiana, las costumbres y las tradiciones de las diferentes culturas que habitaron este enclave.
Y, algo que no debes dejar de hacer al estar en el castillo es apreciar las vistas que desde su altura puedes disfrutar al máximo. Sin duda una excelente forma de empezar con buen pie esta aventura en Dénia.
Una vez que tu recorrido por el castillo finalice no viene mal hacer un paseo por el centro histórico de la localidad. En este espacio podrás conocer la Plaza de la Constitución donde está el majestuoso Ayuntamiento de la ciudad y la Iglesia de la Asunción, erigida entre 1730 y 1750, donde antes se erigía la Ermita de San Roque.
Este templo cristiano destaca por su espléndida cúpula, adornada con tejas vidriadas en tonos azules que brillan bajo el sol mediterráneo.
Al continuar tu visita, podrás adentrarte en la Calle Cavallers, este espacio te depara algunas de las joyas culturales más bonitas de la localidad: el Museo Etnológico de Dénia y la Casa de la Marquesa. En este último lugar, siempre encontrarás interesantes exposiciones que te sumergirán en la rica historia de la ciudad.
La Calle Marqués de Campo es un recorrido obligado al visitar Dénia. Su diseño amplio, adornado con frondosos árboles, resulta el ambiente más animado para cualquier visitante. Es perfecta para una mañana o tarde de compras, donde podrás disfrutar del ambiente local.
Algo importante es que, desde mayo de 2019, la calle está cerrada al tráfico vehicular. Por lo cual resulta un espacio de ocio perfecto tanto para locales y turistas.
Ya que estamos en la calle Marqués de Campo, aprovecha para conocer el Museo del Juguete. En este espacio podrás realizar un viaje en el tiempo, eso sí, protagonizado por la fascinante colección de juguetes antiguos.
Muchas de las piezas fueron fabricadas en Denia durante la época dorada de la industria juguetera local, que tuvo lugar en la primera mitad del siglo XX. Un dato interesante es que, en ese entonces, la ciudad llegó a contar con más de 40 fábricas en funcionamiento.
Otro dato extra al estar en este museo y como parte de tu lista de qué ver en Dénia es que este edificio tiene un pasado singular: fue la antigua estación del tren Dénia-Carcaixent, una línea férrea que estuvo en funcionamiento entre las décadas de 1880 y 1970.
Aunque en la actualidad la estación no existe como tal, el trazado de esta vía ferroviaria permanece y se ha convertido en una “vía verde”, ideal para practicar senderismo y ciclismo.
Más allá del bullicio turístico, se esconde un tesoro histórico en el corazón de Dénia: el barrio de Les Roques. A diferencia del ajetreo que se consigue en Marqués de Campo este espacio ofrece un muy agradable laberinto de estrechas callejuelas y arquitectura tradicional, donde el silencio solo es interrumpido por el canto de los pájaros y el sonido de tus pasos.
Para esos momentos es lo que quieres un poco más de calma en tu visita, este será el paseo ideal en tu lista de qué ver en Dénia, todo para huir de la masividad de algunas de las zonas más turísticas de la ciudad.
Uno de los pilares de la economía local es el puerto de Dénia, un lugar imprescindible para cualquier visitante y donde hacen vida muchos de los locales. Este espacio posee un legado histórico muy rico, ya que el mismo fue un punto de escala fundamental desde la época romana, como fondeadero en el Mediterráneo.
Pero, el puerto moderno que ahora conocemos, comenzó a tomar forma a principios del siglo XX. Desde entonces experimentó un crecimiento que lo llevó a convertirse en el gran espacio que podemos admirar hoy en día.
Además de su significado comercial, este puerto debe estar entre los espacios qué ver en Dénia gracias a un sinfín de posibilidades para el ocio y el disfrute. El visitante debe pasear por sus muelles, contempla las embarcaciones y disfrutar de la gastronomía local en alguno de sus restaurantes.
Pero, para aquellos que buscan más, este es el lugar ideal para embarcarse en una excursión a las islas Baleares.
Ahora que ya conocemos más de Dénia, seguro el interés por descubrir más rincones de esta ciudad te embarga. ¡Tranquilo! Hay mucho más qué ver en Dénia y llega el momento de sumergirnos en el corazón marinero de la localidad: el antiguo Barrio de Pescadores.
Sin duda, una visita encantadora, donde sus casas bajas, llenas de color y con un aire tradicional, te transportarán a un pasado lleno de historias y sabores. Parte del recorrido es visitar las pequeñas y acogedoras plazas que lo adornan: Plaza de Mariana Pineda, Plaza de la Cruz y la Plaza de San Antonio.
Todas te conquistarán con su encanto y te invitarán a tomar un descanso mientras disfrutas del ambiente local.
Pasemos ahora, en este recorrido de qué ver en Dénia, a los espacios más naturales. Y lo hacemos en primer momento con el Parque Natural del Montgó, símbolo de identidad para Dénia.
Con más de 30 años de historia como parque natural, este enclave natural ofrece una experiencia única para los amantes de la naturaleza y el senderismo.
Lo ideal es recorrer sus senderos pedregosos en búsqueda de las zonas más altas. Esto para disfrutar de vistas panorámicas impresionantes del mar Mediterráneo, las playas doradas de Dénia y el pintoresco paisaje de la costa valenciana.
Esta es la oportunidad para conectar con la naturaleza en su estado más puro. Recorre sus senderos, respirar aire fresco, escuchar el canto de los pájaros y sentir la paz de este entorno privilegiado.
¿Otro lugar qué visitar en Dénia? En las costas del Cabo de San Antonio, se esconde un tesoro natural: la Cova Tallada. Una majestuosa cueva, excavada por la fuerza del mar y el viento a lo largo de miles de años, que invita a locales y turistas a adentrarte en un mundo de belleza y misterio.
Llegar a este espacio es muy sencillo y agradable. Desde el puerto de Denia, puedes seguir la línea costera hacia el sur durante menos de 25 minutos, disfrutando de un paseo con vistas espectaculares al mar Mediterráneo.
Sin dudas, no puedes quedarte sin visitar sus diferentes salas y admira la luz natural que se filtra a través de las grietas del techo. Un paraíso para los amantes de lo natural.
Imposible un conteo de los mejores 12 lugares a visitar en Dénia y no incluir sus playas. Dejamos para el final dos de ellas. Primero abordemos Punta del Raset, que se encuentra a escasos metros del casco urbano, al lado de la zona portuaria.
En sus 600 metros de longitud y anchura media de 75 metros, Punta del Raset es conveniente y espaciosa. Resulta ideal para las familias con niños, porque tiene muy buen espacio para jugar, correr y construir castillos de arena, pero sin agobiar a otros visitantes.
Puedes pasarte el día sin preocupaciones porque cuenta con todos los servicios necesarios para pasar un día completo en la playa. Disfruta en los chiringuitos y restaurantes, usa los aseos y duchas y relájate en las hamacas y sombrillas de alquiler.
Así como Punta del Raset es la playa más cercana a la ciudad, con Punta Negra pasa lo contario. Alejada del bullicio turístico, Punta Negra te ofrece un remanso de paz, perfecto para disfrutar de la tranquilidad y la poca afluencia incluso en temporada alta.
Algo que tienes que probar al estar en Punta Negra es el snorkel. Prepárate para sumergirte en un mundo de colores vibrantes y vida marina. Equípate con tus gafas, tubo y aletas y prepárate para una aventura submarina inolvidable. Observa peces de colores, erizos de mar, corales y otras especies que habitan en este ecosistema marino tan rico.
Ahora que ya tenemos un buen listado de qué ver en Dénia, es momento de sugerirte unas actividades más. Claro que ya sabes qué vas a caminar por sus particulares calles, hacer el recorrido por sus espacios históricos o hacer compras en diferentes tiendas y mercadillos.
Pero, ¿qué hacer en Dénia además de eso?, ya mismo te lo contamos:
Dénia es mucho más que sol y playa. Es un lugar donde la historia, la cultura, la naturaleza y, en especial, la gastronomía, se unen para crear una experiencia única. La ciudad es un festín para los sentidos. En 2015 fue declarada Ciudad Creativa de la Gastronomía por la UNESCO.
Las protagonistas indiscutibles de la gastronomía dianense son las gambas rojas. Estas delicias llegan frescas cada mañana para ser subastadas y se han convertido en un referente culinario a nivel mundial. No es de extrañar que la gamba roja sea la imagen del Turismo de Dénia, ¡un símbolo de excelencia y sabor!
Pero la oferta gastronómica de Dénia no se limita a las gambas. Disfruta de una gran variedad de productos del mar, como el pulpo, la sepia o el calamar. Saborea los tradicionales arroces valencianos en sus diferentes versiones: a banda, negro, paella... ¡Hay para todos los gustos!
Tras un día de playa o de turismo, ¿qué mejor que relajarse en una de las terrazas chill-out del Puerto? Déjate llevar por la suave brisa marina, disfruta de las vistas al mar y saborea un cóctel refrescante mientras la música te envuelve en un ambiente relajado.
Parte de la cultura de la ciudad es de exteriores. La zona cuenta con muchas rutas para practicar senderismo y ciclismo que te mantendrán en forma mientras disfrutas de los increíbles paisajes de la zona.
Si eres un amante de la aventura y las emociones fuertes, te encantarán las numerosas actividades acuáticas que puedes practicar en sus aguas cristalinas. Deja un poco la arena y sumérgete en estas deliciosas aguas para hacer mucho más que snorkel.
Desliza a toda velocidad sobre las olas con una moto acuática, desafía al viento con el windsurf o el kitesurf, o elévate por encima del agua con el flyboard o el wakeboard. Como vemos, las emociones no faltaran al planificar qué hacer en Dénia.
Una última actividad en esta lista de qué hacer en Dénia está el hacer un recorrido por la zona de Las Rotas, al sur de la ciudad. Aquí te encontrarás un pequeño grupo de pequeñas calas rocosas, perfectas para disfrutar de un día tranquilo junto al mar.
Pero, si quieres más emoción para terminar tu viaje con un toque único, espera a que caiga la tarde y venga el atardecer para disfrutar de un espectáculo de colores único. La puesta de sol sobre el mar Mediterráneo seguro te dejará sin aliento.
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